Navy Pillay

Ginebra.- La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navy Pillay, reclamó hoy «cambios estructurales e institucionales» para asegurar la igualdad entre hombres y mujeres, particularmente en momentos de transición para los estados.

Pillay se expresó así la víspera del Día Internacional de la Mujer, que este año la ONU celebra bajo el lema «Empoderar a la mujer rural: acabar con el hambre y la pobreza».

La Alta Comisionada instó a los gobiernos de todo el mundo a «reconocer y aprovechar el potencial de las mujeres».

«Es un hecho establecido que las mujeres son frecuentemente las primeras en sufrir cuando los derechos humanos básicos se violan, pero lo que también se conoce es que ellas pueden ser, y son, agentes poderosos para el cambio gracias a su gran fortaleza de espíritu, creatividad e inteligencia», agregó.

Según las estadísticas de la ONU, el pasado año sólo un 19,3 por ciento de los escaños parlamentarios de todo el mundo estaba ocupado por mujeres y sólo 20 de cada cien agricultores propietarios de tierra son mujeres.

Asimismo, solo doce empresas de la lista Riqueza 500 -un inventario anual que elabora la revista Fortune con las 500 mayores empresas estadounidenses- tienen mujeres al frente.

A juicio de Pillay, esta exclusión es un riesgo ya que el rechazo a alcanzar la igualdad de género ha dado lugar a situaciones como la propagación feroz del sida.

Finalmente, defendió la necesidad de «empoderar a las mujeres, incluyendo a las pertenecientes a grupos minoritarios, las ancianas y aquellas en situación de pobreza o con alguna discapacidad».

«Sólo capitalizando el potencial de la mujer como agente de cambio se puede alcanzar una sociedad más justa», consideró.

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