«Como prevé la ley y como venimos anunciando, si hay que intervenir alguna autonomía que no esté en la senda de consecución del déficit público, se hará», aseguró el ministro en una conferencia de prensa tras rechazar el Congreso de los Diputados las enmiendas a la totalidad al proyecto de Presupuestos Generales del Estado para este año.

El objetivo del Gobierno español es que el conjunto de las administraciones públicas cierre el año 2012 en el 5,3 % de déficit público.

Según el ministro, por parte del Estado esa cifra es «alcanzable» como demuestran los datos de ejecución presupuestaria del primer trimestre conocidos el martes, y que sitúan el déficit en términos homogéneos en el 0,83 % del PIB.

Durante el debate, sus advertencias fueron especialmente duras al dirigirse a algunas formaciones políticas que integraron gobiernos autonómicos que acabaron con fuertes desequilibrios, y que hoy han defendido enmiendas a la totalidad de las cuentas del Estado para este año.

«Vamos a clarificar las cuentas de todos, porque tenemos las cifras», advirtió Montoro.

El ministro también informó hoy de que el plan de reformas que el Ejecutivo que preside Mariano Rajoy remitirá el viernes a Bruselas incluirá el proyecto para reestructurar la Administración pública y evitar duplicidades en las competencias.

El Ejecutivo quiere clarificar qué competencias corresponden a cada nivel de la Administración -Estado, comunidades autónomas, diputaciones y ayuntamientos- y determinar qué prestaciones debe ofrecer a los ciudadanos cada una, para evitar solapamientos, ganar eficiencia y ahorrar.

La Comisión Europea ha avanzado que espera que España presente un programa de estabilidad «robusto y concreto» y un plan nacional de reformas con medidas estructurales «convincentes» para impulsar el crecimiento y el empleo.

Montoro reiteró hoy el compromiso «irrenunciable» de España de cerrar 2013 con un déficit público del 3 por ciento del PIB.