Bogotá.– Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) reiteraron hoy en un vídeo que tienen en su poder y como «prisionero de guerra» al periodista francés Roméo Langlois.

En la grabación, difundida por internet, un rebelde, que se identifica como «Ancízar» o «Monazo» y dice ser «jefe de escuadra del frente 15», revela que tienen en su poder a Langlois y asegura que pese a que recibió una herida en un brazo, «está bien de salud».

El guerrillero acompañado al fondo por otros guerrilleros en medio de la espesura de la selva, señala en la grabación que el pasado 28 de abril el frente 15 libró combates por siete horas en la vereda La Libertad de la Unión Peneya, que pertenece al municipio La Montañita del departamento sureño del Caquetá.

«Ancízar» añade que el corresponsal de la cadena France 24 y el diario Le Figaro en Colombia fue capturado «uniformado de militar» en pleno combate.

«Está en nuestras manos, es prisionero de guerra. Está levemente herido en un brazo. Se le ha prestado la atención médica necesaria y está fuera de peligro», añadió el comunicado leído por el guerrillero y que tiene fecha del 30 de abril.

El pasado martes una presunta guerrillera de las FARC había admitió también en un comunicado que leyó en emisoras locales, que Langlois estaba retenido como «prisionero de guerra».

Al parecer el comunicado que leyó «Ancízar» y que fue difundido este domingo es el mismo.

En la grabación «Ancízar» admite que en los choques con el Ejército murieron tres rebeldes y uno más resultó herido, aunque la guerrilla causó la muerte de 19 militares y policías, «recuperó» algunas armas y municiones, y denunció que la fuerza aérea afectó casas de los pobladores con bombardeos indiscriminados.

Al concluir la grabación el jefe rebelde reafirma que tienen a Langlois, quien «efectivamente es francés, es periodista» y finaliza: «esperamos que prontamente superemos este impasse».

El frente 15 de las FARC es conocido por su poderío narcotraficante, ya que «mueve» más de 30 toneladas de cocaína al año, y es el contacto con el cartel mexicano de Sinaloa, según un artículo del diario El Tiempo, en el que se aseguraba que esa facción tendría retenido al periodista francés.

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