«Tenemos muy claro que será complicado tener un Afganistán seguro mientras los terroristas se encuentren a salvo en Pakistán, desde donde pueden dirigir ataques contra nuestras fuerzas», afirmó Panetta ante la prensa desde el ministerio de Defensa afgano.

El secretario de Defensa lanzó un aviso a los talibanes, afirmando que «su momento ha terminado» y recordó el acuerdo alcanzado en mayo en Chicago, por el que sectores de la OTAN continuarán en Afganistán tras la retirada de las tropas en 2014.

Esta visita se produce 24 horas después de que tropas de la OTAN, presumiblemente norteamericanas, mataran ayer al menos a 17 civiles, incluidos mujeres y niños, en un bombardeo aéreo en el distrito de Barak-e-Barak, en la provincia de Logar, en el centro del país.

«Las operaciones de la OTAN que implican pérdidas civiles y materiales no serán de ningún modo justificables, aceptables o tolerables», afirmó hoy el presidente afgano Hamid Karzai, que tras el ataque ha suspendido la visita que realizaba en China.