Santo Domingo, Rep. Dominicana.-La ingeniera Francina Hungría, herida en el rostro tras un asalto en el Ensanche Piantini, en la Capital, no podrá recuperar la visión, según confirmaron ayer médicos del Balcom Palmer Eye Institute, un centro especializado en ojos de la Universidad de Miami, vinculado al Jackson Memorial Hospital.

Luego de varios estudios, los especialistas ratificaron el diagnóstico sobre los daños irreparables que afectan el ojo izquierdo deHungría y la imposibilidad de recobrar la vista, según reseña una nota informativa difundida en periódico Listín Diario.

Su ojo derecho había sido declarado irreparable a pocos días de recibir las primeras atenciones médicas en Santo Domingo.

La ingeniera fue llevada pasada la una de la tarde al centro de salud especializado, ubicado próximo al hospital Jackson, donde permanece ingresada desde el viernes pasado.

En este lugar fue sometida a una evaluación médica y a un estudio de ecografía, de acuerdo a la fuente antes citada. La profesional fue evaluada por la doctora Rebecca A. Shelds.

El diagnóstico de las evaluaciones, según las explicaciones ofrecidas, señala que el ojo resultó muy afectado, la retina está muy separada, por lo que el órgano presenta daños irreversibles.

En ese sentido, exhortó la colocación de prótesis como tratamiento estético, así como cirugía máxilofacial para corregir lesiones óseas, y mejorar la estética.

De su lado, el doctor Salomón Melgen, quien fue el primer médico que la recibió tras su llegada a Miami, manifestó que están en disposición de evaluarla nuevamente y explorar alternativas.

La paciente continuará ingresada en el Jackson Memorial Hospital para ser sometida a cirugía maxilofacial.

Llantos

La información sobre el diagnóstico fue recibido entre llantos de parte de los padres y amigos que le acompañan. Sin embargo, ella se mantuvo muy fuerte. “Mami, no llore, tranquila, cálmate”, le decía con frecuencia Hungría cuando escuchaba el llanto de su madre, según precisa en su nota el periódico.

Resalta que luego de escuchar el diagnóstico, el senador Félix Bautista, presidente de Fundi, entidad encargada de su traslado a Miami, dijo que es necesario legislar y tomar medidas drásticas para desarmar a la población civil.

“El caso de Francina es doloroso y lamentable. Una joven ingeniera con apenas 28 años, le han quitado la mitad de su vida en forma inesperada, que la justicia sancione con la pena máxima a los culpables”, dijo el legislador.

Además de los problemas en sus dos ojos, Hungría presenta fracturas en el hueso de la mejilla y atrofia en nervios de la cara, lo que le afecta la sensibilidad en la parte izquierda del rostro manifestando dificultades para masticar.

La ingeniera fue dada de alta ayer del hospital, a petición de la familia, y llevada a West Palm Beach para ser evaluada nuevamente por el doctor Melgen, el médico dominicano especialista en oftalmología, en busca de cualquier otra opción que pueda dar resultados positivos ante el diagnóstico.