En primer lugar, te va a ser difícil saltar en caída libre. En segundo lugar, el salto reducirá la velocidad de esa caída tan rápido como seas capaz de saltar, y es una mala noticia para los que no se dedican profesionalmente al baloncesto, es decir, para la gran mayoría. En tercer lugar, no puedes predecir a qué parte del cuerpo afectará la colisión y qué lesiones provocará.
Tampoco es la mejor opción, debido a que, en el momento de la caída, tus pies soportarán una masa, al menos, 10 veces mayor que tu peso corporal. Esto puede acarrearte lesiones muy graves.
En cuanto sientas que el ascensor está cayendo, de inmediato túmbate bocarriba sobre el suelo del ascensor. En esta postura, la fuerza del impacto se repartirá igualmente por toda la superficie de tu cuerpo.
Entonces, lo mejor será sentarse en el suelo, en esta posición la carga sobre los huesos y articulaciones será menor que en posición vertical (de pie). Si el ascensor cuenta con un espacio reducido, lo mejor será que dobles las rodillas porque te ayudará a reducir la fuerza del impacto.