Beethoven se preparaba un café de 60 granos por día, mientras Voltaire bebía 50 tazas al día y vivió hasta los 83 años. Entonces, ¿la adicción al café no es tan horrible como la pintan?
Sube la actividad cerebral
No es ningún secreto que el café sube la atención, mejora la concentración, acelera la reacción de la persona. Pero sólo el café con azúcar es capaz de convertirte en un pequeño genio durante un tiempo, porque es la combinación de cafeína y glucosa lo que activa las áreas deseadas del cerebro. Sin embargo, nunca bebas café con el estómago vacío: en este caso, la bebida tiene un efecto totalmente contrario.
Sube la presión arterial
Una taza de café ayuda a luchar contra la presión arterial baja. Sin embargo, no es recomendable para las personas que sienten taquicardia después de beber una taza. A los hipertónicos, la costumbre de beber café no les hace daño porque el organismo, con el tiempo, se adapta a la bebida y deja de reaccionar subiendo la presión.
Fortalece la inmunidad
Científicos de varios países descubrieron que el consumo de café reduce el riesgo de muerte prematura: cuantas más tazas al día bebas, menor es el riesgo. La cantidad óptima de las tazas es tres. Esto se debe a que el café cambia el funcionamiento del sistema inmune, haciéndolo más activo y saludable. También fortalece el hígado, el corazón y el tracto gastrointestinal. Pero procura beber el café recién molido. El café soluble tiene menos nutrientes saludables y los aditivos químicos tienen un efecto negativo en el tracto gastrointestinal.
Alivia el dolor de cabeza
La cafeína que se contiene en el café natural es capaz de combatir el dolor de cabeza y la migraña. Pero no puede sustituir los analgésicos. Los medicamentos especiales son más eficientes, porque tienen cafeína, la cual aumenta el efecto de las sustancias activas en un 40%.
Antiestrés y antidepresivo
Puedes deshacerte del estrés gracias a la producción de dopamina y serotonina, que «provocan» el estado de buen ánimo. Tan sólo una taza de café o incluso nada más que su aroma te ayudará en una situación de estrés. Y la cafeína es uno de los estimulantes más comunes del sistema nervioso centra. Es justamente esto lo que no nos deja caer en una depresión. Sin embargo, este efecto de la cafeína sólo funciona con café: la cafeína del té, gaseosa o chocolate no es capaz de estimular los nervios con la misma fuerza.
Mejora la memoria
Los mismos estimuladores y neurotransmisores con los que el café sube nuestro ánimo y eficiencia mejoran también nuestra memoria. Claro que esto no se aplica a la memoria a largo plazo. Pero ya es una buena noticia, porque inicialmente toda la información se guarda justo en la memoria a corto plazo y sólo una hora después, bajo las circunstancias perfectas, nuestros conocimientos «se graban» en la memoria a largo plazo.
Baja el peso
Tus sueños se hacen realidad, porque el café de verdad te puede ayudar a mantener y a reducir tu peso. El nivel bajo de la hormona leptina en el organismo hace que almacenes la grasa, mientras que la cafeína sube su nivel en el organismo. Por lo mismo, los amantes del café no suben de peso tan rápido y el ejercicio para ellos resulta más eficiente.