El tren expreso Puyuma 6432, que iba desde Shulin a Taitung y llevaba 366 pasajeros a bordo, descarriló a las 16.50 horas locales (08.50 GMT).
Los servicios de rescate y de salvamento, que contaron con el apoyo de 120 militares, han logrado sacar finalmente a todos los pasajeros de los ocho vagones del convoy, según los bomberos.
Todos los heridos, diez de ellos muy graves, fueron trasladados a hospitales cercanos, donde están siendo tratados.
El único extranjero entre los heridos es un estadounidense que sufre heridas en el pecho, según datos de los hospitales citados por los medios locales.
El Gobierno de Taiwán ha abierto una investigación sobre las causas del accidente, que se produjo cuando el tren descarriló tras salirse de la vía la locomotora en una curva y chocar contra un poste de cemento, que quedó medio derribado, según las imágenes de la cadena de televisión taiwanesa CTI.
Según datos de la empresa ferroviaria taiwanesa, el tren fue revisado hace menos de un año y se encontraba en buenas condiciones.
Cinco vagones resultaron muy dañados, según las imágenes transmitidas en vivo desde el lugar de los hechos por la televisión NextTV.
A falta de datos oficiales, uno de los pasajeros dijo a la televisión SET que el accidente ocurrió casi inmediatamente después de entrar en una curva, a unos 300 metros de la estación de salida, que tal vez el tren tomó a excesiva velocidad.
Por su parte, el conductor del tren, que se encuentra en la unidad de cuidados intensivos, dijo al llegar al hospital que el tren había chocado con un objeto extraño antes de descarrilar, según NextTV.
Los equipos de salvamento tuvieron dificultades para poder sacar a los pasajeros de los vagones y tuvieron que utilizar sopletes para poder abrir salidas.
Una de las razones por la que se han producido tantos heridos en el accidente es la falta de costumbre en el uso de los cinturones de seguridad en los trenes, dijeron expertos taiwaneses.