Baní.-Un joven de 26 años de edad fue abatido de cinco balazos por otro hombre hasta ahora no identificado por las autoridades cuando la hoy víctima compartía con amigos en la tarde del pasado miércoles celebrando la llegada del  nuevo año en el interior de un colmadón ubicado en la calle Duvergé norte.

La víctima es Yimi Alesander Reynoso Zapara, de 26 años de edad, residente en la calle La Hermandad, número 29 del sector La Saona, en la zona norte.

Tras resultar herido, Reynoso  Zapata fue conducido por parroquianos al hospital Nuestra Señora de Regla, donde llegó sin signos  de vida.

Su cadáver fue llevado a la  morgue de dicho centro   de salud  donde el médico legista, Walter López informó que su cuerpo recibió cinco heridas de arma de fuego en distintas partes del cuerpo que le produjeron una hemorragia interna y externa y shock hemorrágico que le  provocaron la muerte.

De acuerdo a versiones de testigos que presenciaron el asesinato de Reynoso Zapara, el autor fue un hombre que  se desmontó de una motocicleta y tan pronto penetró a dicho establecimiento comercial le realizó los disparos para de inmediato emprender la huida.

A la morgue del centro de salud también se presentaron el fiscal Jacinto Herrera y varios agentes de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), de la Policía Nacional.

Esta muerte es el primer caso de violencia que se registra en el municipio de Baní.

El año pasado, según datos  del doctor López Pimentel, en la provincia Peravia se registraron 126 casos  de muertes violentes, de las cuales más de 25 fueron por armas de fuego, en tanto que más de 50 fueron por accidentes de tránsito de vehículos de motor.

Las autoridades policiales y judiciales investigan las circunstancias del hecho.

El cadáver de Yimi fue enviado al Instituto Regional de ciencias forenses (INACIF) de la provincia de Azua.

No hay detenidos

Además del  asesinato del  joven Reynoso Zapata, todavía las autoridades policiales no han apresado a dos presuntos  autores de la muerte de la señora Lucrecia Sanquintín Zoquier, de 58 años de edad, quien recibió una herida de arma de fuego en el cuello la noche del 24 de diciembre del año pasado cuando desconocidos que iban a bordo de varios motores realizaron varios disparos frente a un denominado punto de drogas en el barrio Santa Rosa.

Con relación a este hecho, trascendió que dos jóvenes identificados como  El Panadero y El Pelotero o Capital, son los presuntos autores de la muerte de la señora Lucrecia.

EL NACIONAL