Con la expectativa de inmunizar al menos al 70% de la población para detener la propagación del Covid-19 en la Isla, el gobierno y los municipios se preparan para trabajar el proceso de vacunación masiva —que se implementará por fases— una vez lleguen las primeras dosis de la vacuna, lo cual debe ocurrir en las próximas semanas.

La expectativa es que una vez la Administración de Drogas y Alimentos federal (FDA, por sus siglas en inglés) apruebe el uso de la vacunas de Pfizer y Moderna, se reciban en la Isla las primeras vacunas dentro de un periodo de 48 horas.

Según se informó, antes de que finalice el año Puerto Rico debe haber recibido 353,125 vacunas, las cuales se dividen en 205,725 vacunas de Pfizer y 147,400 de Moderna. La fase de vacunación iniciará con el personal de primera respuesta y el esencial, las égidas, los centros de envejecientes y las personas mayores de 65 años, entre otros.

Intervienen los alcaldes

En entrevista con EL VOCERO, varios alcaldes compartieron su opinión sobre el plan de vacunación y expresaron sus expectativas en cuanto al proceso que iniciará en momentos en que continúa el alza en casos, hospitalizaciones y muertes por Covid-19.

“Tengo el protocolo de cómo ellos interesan que se vaya distribuyendo esa vacuna. Sé que están en espera de que la FDA dé su visto bueno; eso debe ocurrir entre el 10 al 17 de diciembre. En adición a eso, intercambié mensajes con el general (José J.) Reyes dejándole saber que dentro de los municipios con mayores contagios está Caguas”, expresó el alcalde, William Miranda.

Se espera que Caguas sea uno de los lugares donde se llevará a cabo la vacunación masiva. Sin embargo, el municipio está “en espera de esa coordinación”, indicó Miranda Torres. “Uno tiene una expectativa de que a verano o comienzo del próximo semestre escolar en agosto, pues tengas a todo el mundo ya listo”, sostuvo el alcalde, quien mencionó que tan pronto pueda se pondrá la vacuna.

Por su parte, el alcalde de Guaynabo y presidente de la Federación de Alcaldes, Ángel Pérez, respaldó las fases establecidas para iniciar con la inmunización, aunque considera que se deben incluir otros empleados en el proceso inicial. “Estoy solicitando que incluyan los de control ambiental, los de manejo de emergencias, porque también desde el día uno (ese personal) ha estado en la calle”, sostuvo.

“Entiendo que ese debe ser el proceso y posteriormente el público en general. Nosotros vamos a hacerlo. Ya hemos tenido la experiencia de trabajarlo tipo servicarro y yo entiendo que de esa manera se debería trabajar. Nosotros hemos tenido éxito en lo que fue la vacunación contra la influenza y cuando llegaron las pruebas de antígeno lo hicimos tipo servicarro y fue todo un éxito”, agregó.

Priorizan la vacunación El aspecto de la vacunación fue discutido por los alcaldes en la reciente reunión que se efectuó por el alza en casos de Covid-19. El alcalde de Villalba y primer vicepresidente de la Asociación de Alcaldes, Luis Javier Hernández Ortiz, planteó que se les explicó de manera superficial algunos detalles sobre el proceso de distribución de las primeras vacunas.

“Me preocupa que mientras esto (de la vacunación) ocurre, el País tiene que continuar tomando medidas de prevención… sistemas de rastreo. Yo estimo que el proceso de aplicación de la vacuna podría tomar cinco o seis meses, o sea que en mayo o en junio todavía vamos a estar aplicando vacunas en el País, o sea que no se puede bajar la guardia con relación de las medidas de rastreo y de prevención”, puntualizó.

Salud explica la logística

La subsecretaria del Departamento de Salud (DS), Iris Cardona, afirmó que una vez se apruebe el uso de las vacunas, Puerto Rico debe recibir las primeras dosis dentro de 48 horas. “Una vez se autorice la vacuna, en esa primera entrega van a entregar un poco más de 30,000. Después hay entregas subsiguientes semanales hasta alcanzar sobre 300,000 dosis de vacunas antes de que se acabe el año, asumiendo que la autorización ocurra”, sostuvo.

La primera fase implica vacunar a la población crítica, que incluye a los profesionales de la salud y a los que viven “en condición de congregación”, como las instalaciones de cuido prolongado, las égidas, las personas que viven en albergues y las que están en las cárceles. También se incluye a los trabajadores de infraestructura crítica y a los primeros respondedores.

“Ahí vamos a necesitar la ayuda de los municipios porque se van a establecer una serie de actividades dirigidas. Inicialmente, el primer grupo son los llamados ‘first responder’, que incluye policías, emergencias médicas, bomberos, etcétera, pero ahí se incluye también policía municipal, empleomanía de las agencias de gobierno a nivel municipal y vamos a establecer unas actividades dirigidas”, añadió la funcionaria.

Explicó que todavía esas actividades no tienen fecha, pero la idea es que la vacunación ocurra por medio de servicarro, tal y como está ocurriendo actualmente con la vacunación de la influenza. “Es una logística de mucho detalle y aunque no necesariamente van a ser los mismos puntos (de la vacunación de la influenza), sí se están considerando lugares donde este modelo se pueda hacer”, sostuvo Cardona.

11 centros de vacunación

El ayudante general de la Guardia Nacional, José J. Reyes, explicó que los municipios se integran tanto en la fase 1B —personal de primera respuesta y esencial, entre otros— como en la fase 2. De hecho, Reyes dijo que la fase 1B constituye el grupo más grande dentro de la primera fase con aproximadamente 400,000 a 600,000 personas.

“La Guardia Nacional va a establecer 11 centros de vacunación regionales que van a estar operando para vacunar a esas personas. Dentro de cada centro debemos establecer unas 10 estaciones de vacunación. Se están haciendo comunicaciones para conocer el personal (de las distintas agencias de ley y orden y salud). Posteriormente, se le informará a cuál centro regional deben ir a vacunarse”, detalló.

Reyes afirmó que las reuniones con los alcaldes van a seguir ocurriendo, pues considera que la gestión municipal es esencial para llevar el mensaje al pueblo. “Hay que llevar un mensaje de concienciación a todo el pueblo de Puerto Rico y los alcaldes nos van a ayudar porque son figuras esenciales en los municipios, de que esta es una vacuna segura y que necesitamos vacunarnos todos. No vamos a ser conejillos de indias”, subrayó.