Andar bien vestido con trajes elegantes y zapatos lujosos en uno de los países más pobres del mundo puede parecer una locura. Sin embargo, ¿quién dijo que es imposible? En África hay quienes ponen como prioridad su imagen y apariencia por sobre otros aspectos de la vida.
Solo hay que viajar a Brazzaville, capital de la República del Congo. Aquí, donde no hay agua potable, un grupo de personas se pasea exhibiendo la moda europea entre las calles sin asfaltar y el montón de basura que se acumula en los frentes de las viviendas.
Muchos de ellos se endeudan por décadas. Son de clase trabajadora y toman préstamos con los que podrían comprar una parcela de tierra, pero eligen invertirlo en trajes y zapatos importados por los que suelen pagar millones y millones de francos congoleños. Así es la vida de «Los Dandis del Congo«.
Viven en uno de los países más pobres del mundo, pero visten con prendas de lujo.
¿Qué es un dandi? Originalmente es una persona que se destaca entre la multitud por su elegante y extravagante forma de vestir, y que utiliza un lenguaje educado y refinado. Además, posee conocimientos de moda y proviene de una familia que pertenezca a la burguesía o a las clases más adineradas del país. También, deben tener una personalidad fuerte y carismática, y ser aclamados y ovacionados por las mayorías.
La del Congo es una adaptación local. Si bien muchos de ellos no son ricos, estas personas utilizan conjuntos elegantes y muy coloridos. Y, por supuesto, de marcas reconocidas e internacionales, no hay lugar para las imitaciones. Suelen vestirse con trajes Kenzo, Yves Saint Laurent y Giorgio Armani, usar artículos de lujo Gucci y Prada y utilizar zapatos Westons.
Para estos dandis la imagen lo es todo, por eso es tan importante vestirse bien. Hay que mantener las apariencias. Pero detrás de esto hay una historia que data de la Segunda Guerra Mundial, ya que miles de congoleños participaron del conflicto combatiendo a favor de Francia.
Los integrantes son de clase trabajadora. Muchos se endeudan para poder comprar sus trajes.
Luego de servir en la batalla volvieron a sus casas. Y, por supuesto, al retornar al Congo trajeron lo último de la moda europea. Estas personas, con flamante indumentaria parisina, comenzaron a reunirse en privado, y a organizar fiestas y galas para exhibir sus prendas.
Con el tiempo nació Le Sape (Sociedad de Ambientadores y Hombres Elegantes), un exclusivo club que nuclea a «Los Dandis del Congo». Este movimiento tiene como estandarte la moda y la elegancia. Y se mantiene activo hasta la actualidad, pese a ser uno de los países más pobres del mundo.
En el Congo, además de las riquezas naturales, reina la violencia y la corrupción. Décadas de guerra civil y de dictaduras hacen de este país uno de los más desiguales a nivel económico y social. Sin educación gratuita ni obligatoria y con un promedio escandaloso de violaciones sobre las mujeres.
Pero no importa la pobreza que rodea al país. A pesar de esto, Le Sape es una tradición, y estos dos mundos conviven en paralelo. Como todo selecto club, también hay reglas que seguir.
Los Dandis del Congo no pueden combinar más de tres colores en sus trajes y están obligados a usar al menos una vez en su vida zapatos Weston. Además, deben ser honorables y un ejemplo a seguir en sus aldeas o ciudades. Y deben levantar las banderas de la inclusión, el pacifismo, la libertad y la superación.
Los Dandis del Congo lucen su vestimenta en las calles sin asfaltar de Brazzaville.
Un dandi llega a pedir varios créditos en su vida. Por ejemplo, hay quienes se endeudaron por casi 7 millones de francos para comprarse una de sus prendas. Para tener una idea, el promedio salarial en Congo es de unos 700 mil francos congoleños mensuales. Todo sea por el estilo y el prestigio.
Y, aunque parezca una locura, este movimiento no sólo se mantiene en pie en la ex colonia francesa, sino que también varios países europeos han formado sus propios movimientos Sape. Por ejemplo, se pueden ver en Italia, Francia, España e incluso en la ciudad de Londres.
Los Sapeurs están hoy en auge, pero estuvieron a punto de desaparecer en 1980, cuando las guerras civiles arrasaron el país. En ese momento surgió un lema entre los dandis: «Dejemos las armas y vistámonos elegantemente».
Los Sapeurs o «Dandis del Congo» pertenecen Le SAPE (La Société des Ambianceurs et des Personnes Elegantes).
Este movimiento puede parecer un culto al lujo entre la miseria. Sin embargo, muchos de ellos son elogiados. Y se cree que algunos ven a los protagonistas como héroes de clase alta que van contra el sistema, es decir, una tendencia como forma de protesta. Por otra parte, el Congo podría haber sido uno de los países más prósperos de África.
Sin embargo, los minerales coltán y oro se convirtieron –más que en una salvación– en una pesadilla. Las guerrillas prácticamente controlan en país y la altísima corrupción atenta contra el desarrollo del mismo. Mientras tanto, los Sapeurs exhiben sus lujosos trajes mientras caminan con sus zapatos de piel de cocodrilo por calles sin asfalto rodeadas de hambruna y pobreza.
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