Un adolescente de Nueva Jersey disparó fatalmente a cuatro miembros de su familia con un rifle semiautomático, en la víspera de Año Nuevo en 2017, quien recientemente fue sentenciado a 150 años de prisión.

El jueves, el juez de la corte superior del condado de Monmouth, Marc C. Lemieux, dictó la sentencia a Scott Kologi, ahora de 20 años, de Long Branch, quien fue condenado en febrero por todos los cargos, incluidos cuatro cargos de asesinato en primer grado.

“La intención de este tribunal es que este acusado nunca vuelva a ver la luz del exterior de una celda”, dijo LeMieux, “espero que algún día se dé cuenta de la magnitud de lo que ha hecho”.

En la víspera de Año Nuevo, durante una fiesta familiar, Kologi, entonces de 16 años, mató a su hermana, Brittany Kologi, de 18 años, a su madre, Linda Kologi, de 44 años, a su padre, Steven Kologi, de 42 años, todos de Long Branch, y también mató a la compañera de su abuelo, Mary Schulz, de 70 años, de Ocean Township.

En la corte el jueves, los abogados de Kologi argumentaron que la grave enfermedad mental de su cliente lo llevó a matar a su familia; los abogados pidieron una sentencia de 30 años.

“Es un niño con una enfermedad mental que le rogó ayuda a su madre y nunca la obtuvo”, dijo el abogado defensor Emeka Nkwuo, según informa Asbury Park Press.

El testimonio durante el juicio reveló que la madre de Kologi no quería que su hijo le dijera a su terapeuta que pensaba en matar gente porque temía que lo hospitalizaran, informa Asbury Park Press .

“Estos fueron actos de maldad, realizados por alguien que sabía exactamente lo que estaba haciendo”, dijo Brennan, según el comunicado de la oficina del fiscal. “Los mató porque pudo. Los mató porque quiso”.

El adolescente apretó el gatillo 14 veces, dijo la fiscal adjunta del condado de Monmouth, Caitlin J. Sidley, según el comunicado. Doce de esos disparos alcanzaron a las víctimas.

Durante la audiencia, Brennan enfatizó que Kologi planeó los asesinatos. Investigó “si el arma que usó sería efectiva contra la policía que respondía con chalecos antibalas”.

“Usando tapones para los oídos para protegerse del sonido del arma, Kologi luego maniobró lentamente alrededor de sus cuerpos y bajó las escaleras antes de asesinar ‘casualmente’ a Schulz y a su hermana, que estaba en casa durante las vacaciones de invierno después de su primer semestre en la universidad”, dice el comunicado.

El hermano y el abuelo de Kologi también estaban en casa en ese momento y sobrevivieron al ataque.

“Aunque sobrevivieron físicamente”, dijo Brennan, “todavía tendrán que lidiar con las cicatrices mentales de lo que vieron”.

“Aunque fue declarado culpable, creo que la condición mental de Scott es el impulso detrás de esa noche en 2017”, dijo. “Le pido a la corte un poco de compasión y comprensión en este asunto”.

Kologi debe cumplir al menos el 85 por ciento de la sentencia, o 127 años y medio, antes de ser elegible para la libertad condicional, según los términos de la Ley de Prohibición de Liberación Anticipada de Nueva Jersey, según un comunicado emitido por la oficina del fiscal.