NUEVA ORLEANS, ESTADOS UNIDOS El presidente estadounidense, Donald Trump, se burló el domingo de la estrella del pop Taylor Swift después de que la cantante recibiera fuertes silbidos durante el Super Bowl de la NFL en Nueva Orleans. Trump, primer mandatario en ejercicio en asistir a la final de la liga de football americano (NFL), abandonó el estadio poco después del medio tiempo de la rotunda victoria de los Philadelphia Eagles 40-22 frente a los Kansas City Chiefs. El presidente, sin embargo, no se resistió a dejar un comentario en redes sociales sobre Swift, que también estaba en la grada del Caesars Superdome apoyando a su pareja, la figura de los Chiefs Travis Kelce. Swift, la cantante más popular del momento, recibió sonoros abucheos cuando apareció en las pantallas gigantes durante un descanso del partido.