Bahía de Ocoa, Azua. Con la siembra de una planta de vid “Misiones”, el presidente Danilo Medina dio inicio este lunes al proyecto Ocoa Bay, el primer desarrollo enoturístico del país y del área del Caribe.

Un informe de prensa de la Presidencia indica que se trata de una iniciativa de inversores dominicanos y estadounidenses que cuenta con un monto global de 167 millones de dólares y que creará en la etapa de construcción 1,500 empleos.

Señala que esto ha sido el resultado de la puesta en marcha de la Ventanilla Única, creada por el Gobierno para captar ese tipo de inversiones.

El área inicialmente comprometida en el complejo es de 1.4 millones de metros cuadrados, en la Bahía de Ocoa.

La primera fase comprende 140 mil metros cuadrados, que tiene como principal atributo un viñedo con capacidad para producir vinos de alta calidad y uvas de mesa.

En ese contexto, el ministro de Turismo, Francisco Javier García, dijo que esta iniciativa constituye el inicio de una serie de grandes inversiones que serán hechas por inversionistas y que beneficiarán al Polo Turístico 8, que comprende la región Sur del país.

Javier García afirmó que el proyecto marcará un antes y un después en el desarrollo turístico de la región y exhortó a los empresarios a venir a estas tierras donde están dadas las condiciones de inversión.

Dinamizará la economía

Mientras, Jean Alain Rodríguez, director del Centro de Exportación e Inversión (CEI-RD), afirmó que este complejo dinamizará la economía, no solo de la provincia de Azua, sino del país y de la región, y además, fortalecerá la locomotora del desarrollo nacional.

“Estamos sorprendidos por la conjugación de factores, que hacen este lugar tan especial y único en el mundo. Y orgullosos porque será un proyecto que agregará un nuevo elemento a nuestra marca-país; el vino dominicano, colocándonos en el mapa mundial de los viñedos, demostrando así que nadie lo hace mejor que los dominicanos, cuando lo hacemos bien”, puntualizó.

La inversión inicial del proyecto es de 70 millones de dólares, y la creación en una primera fase de 600 empleos.

Tanto la inversión como la creación de fuentes de trabajo, por su importante componente agrícola, es más alta que los proyectos turísticos tradicionales, según establecen sus promotores.